El Gran Día

Un día, Chrissy rompió aguas. No podía más de emoción. ¡Por fin iba a traer a sus niños al mundo! Se le saltaron las lágrimas cuando los gemelos por fin nacieron.
Annie, como siempre, junto a ella durante todo el proceso. Pero entonces, sintió que algo raro pasaba. El día había sido muy intenso, y pensó que quizá fueran los nervios. Pero se equivocaba.