Momentos Inolvidables a Través de los Oidos y los Ojos de un Niño.

Son muchas las cosas importantes que nosotros no valoramos. Damos por hecho la comida, la ropa que usamos, la casa que habitamos, nuestra familia, la lluvia, el habla, incluso la vida misma. Lamentablemente, muchas veces, necesitamos un golpe duro para darnos cuenta de la importancia y el valor de las cosas.
En la foto de arriba, Harold Whittles experimentó por primera vez, la audición. En sus ojos, percibimos puro asombro. Su mundo previo cambiado por siempre por un pequeño pero potente aparato. La foto, que toca nuestra fibra sensible fue tomada en 1974 cuando el fotógrafo Jack Bradley logró parar el tiempo y helar este precioso momento emocional para siempre. Los niños son criaturas maravillosamente puras y honestas así que no encontraríamos una reacción más auténtica que esta.