A Palabras Necias, Oidos Sordos

Si las miradas matasen, Elizabeth Eckford hubiera estado muerta en aquel momento, mucho más antes de que pudiese tener el gran impacto que ha tenido como activista en las luchas antirracistas estadounidenses. El fotógrafo logró captar el odio y la furia de los estudiantes caucásicos y la hostilidad que irradian llega a ser palpable. Esta imagen nos presenta el panorama completo de la realidad de aquella época cuando prevalecía la inequidad y las injusticias raciales.
Eckford fue uno de los nueve estudiantes suficientemente resueltos para engendrar el cambio absolutamente necesario en esta era, tras la ilegalización de la segregación de los alumnos según una declaración hecha por la Corte Suprema de los Estados Unidos en el año 1956. A pesar del mar de emociones negativas que la envuelve, amenazando con tragarla, Elizabeth se mantiene serena e inalterada y si se sentía algo intimidada en este momento, no fue nada perceptible; de hecho, el contraste es muy marcado, el populacho amenazador y enojado frente a una Elizabeth tranquila y compuesta.