Rod Carew

Sin duda, un miembro de la realeza beisbolera es Rodney Cline Carew. Es indiscutiblemente uno de los mejores jugadores de la historia del béisbol. Nacido en Gatún, Panamá, el primero de octubre de 1945, este pelotero, desde su entrada dramática a la vida en el vagón de un tren, adoptó el hábito de sacudir al mundo y hacer olas y eso fue precisamente lo que hizo al mundo de béisbol. El primer y segundo base de los Minnesota Twins y los California Angels fue un éxito rotundo en las Grandes Ligas.
Hizo su debut con los Minnesota Twins, el 11 de abril, 1967 logrando obtener el título de AL Rookie of the Year (Novato del Año). Durante su carrera de 18 años, conquistó siete títulos como mejor bateador y también fue reconocido como el Jugador más Valioso del Año en 1977. Entre los honores que le han sido otorgados, sobresalen los siguientes: en su tierra natal, renombraron el estadio nacional en su honor, fue ingresado en cuatro Salones de la Fama beisboleros incluyendo el de Copperstown, y además, Carew es el único latinoamericano que ha tenido el mérito de que sus dos equipos de la MLB se le retiren su número, el 29. Por su récord de 3,053 imparables conectados en toda su carrera, (en 19 temporadas); por un asombroso total de 15 juegos de las Estrellas, (12 de ellos jugados con su primer equipo), 348 bases robadas, y siete veces campeón base de la Liga Americana de Béisbol, (superado sólo por Pete Rose), rendimos homenaje a uno de los más grandes que ha pisado la cuadra de la pelota de base.